Desde mi más temprana edad siempre he
querido ser un héroe, un superhéroe para ser exacto. Mis pobres
padres tuvieron que sufrir mis intentos de volar desde sillas y
sillones con un mantel por capa y al grito de SUPERMAN!!!
Y desde
entonces siempre he intentado aspirar a ser eso, un héroe.
En el
transcurso de la infancia me he ido metiendo en problemas para ayudar
( salvar decía por aquel entonces ) a amigos en apuros, creándome
más problemas yo en el camino.
Fue pasando el
tiempo y mi mundo de fantasía heroica se estrelló con la realidad
al llegar la adolescencia y la temprana juventud. Aquí es donde
descubrí que el mundo es más cruel, egoísta y violento de lo que
gente más afortunada que yo llegará a descubrir jamás.
Y en un entorno
hostil solo puedes hacer una cosa para sobrevivir, adaptarte.
Entonces me
convertí en un guerrero-mercenario capaz de decapitar a todo aquel
que se interpusiera en mi camino con intenciones de procurarme algún
mal.
Y como todo
soldado en campaña, fui haciendo buenos camaradas por el camino y
los reuní en mi entorno dejando que solamente ellos pudieran
herirme por darles yo ese poder e importancia. Así que me rodee de
un selecto y pequeño grupo de buenas personas para que me recordaran
que existen y que yo, a mí manera, también lo era.
En mi afán por
descubrir cosas nuevas descubrí que la humanidad no está tan
podrida. Que aún hay puntos de luz en la oscuridad. Que hay personas
buenas, muchas más de las que nunca pensé que me encontraría.
Personas que
sin conocerlas te ofrecían su ayuda sin pedir nada a cambio.
Personas que son capaces de ayudar a desconocidos con una sonrisa
sincera en los labios. Personas que me hicieron recordar algo de mi
niñez.
Boooom!!! Algo
estalló dentro de mi cabeza.
Tan enfrascado
estaba en la lucha que no era capaz de ver que, entre todas las
personas que pelean día a día por sobrevivir, se alzan algunas por
encima del tumulto. Algunas personas que sin ser especiales ni
excepcionales son auténticos héroes. Héroes del mundo real.
Estos héroes y
heroínas (pues escribo según el genero predeterminado de nuestra
lengua) son personas que no buscan la gloria, la fama o el dinero.
Son personas que lo único que hacen es realizar bien su trabajo.
Y no me refiero
solamente a policías, médicos y bomberos (la ficción ya se encarga
de ensalzarlos).
Hablo de todas
aquellas que madrugan con un buenos días en los labios y se despiden
con un buenas tardes, buenas noches o hasta mañana de sus puestos de
trabajo.
Aquellas que ya
sea detrás de un mostrador, de un micrófono, un volante o delante
de un ordenador (y más que me dejo) lo hacen de la mejor manera que
pueden. De una manera profesional haciendo que con su pequeña
contribución la sociedad funcione mejor. Haciendo que la vida sea
mejor.
Todos estos
pensamientos me han llevado a querer ser una persona mejor, un
profesional mejor.
Todos estos
héroes me han recordado algo primigenio en mi alma.
Quiero ser un
héroe.
Así que no hay
que temer por los malos tiempos que se están viviendo. La crisis,
los corruptos, y todos los villanos juntos no pueden parar lo que se
avecina. Pues los héroes están ahí, entre nosotros. Dispuestos a
cargar con el peso que muchos no pueden soportar. Dispuestos a
sacrificar lo que los demás no pueden. Dispuestos.
Nada hay que
temer.
Los héroes
vuelven.
The heroes come
back
Dedicado a
todas esas personas que sin darse cuenta me han marcado, enseñado y
cambiado tanto.
Gracias.